viernes, 26 de noviembre de 2010

El "sin vivir" de la vida

Conversaba hoy de casualidad por cámara con un primo que tengo años que no veo, él vive en Venezuela, le pregunté: Cómo estás? cómo están  tu esposa e hijos? y me respondió: VIVOS!.....esa respuesta me dejó pensativa....ciertamente, como me dijo mi primo, " estar vivos en éste país ya es una gran suerte" y asi es....el estar vivos, es una suerte, ya que cada día son muchos los que caen en manos del hampa, unos sobreviven y otros son asesinados como ocurrió con otro primo mio por parte de padre, que hace dos domingos lo mataron en Venezuela para robarle el auto, según al parecer se resistió al atraco. Y es que uno no sabe cómo va a reaccionar en una situación asi, los nervios, el susto, y el saber que vives en un riesgo constante, ejercen presión en tu sistema nervioso y de allí surge cualquier reacción inesperada.

Recuerdo la única vez que fuí atracada con una pistola en Venezuela, estaba en una tienda de esas que hay en las estaciones de gasolina,  había entrado a comprar unos dulces para mi hija y mi sobrino quienes estaban en el auto esperandome junto con un amigo nuestro, y en la tienda estaba sólo la cajera, un chico que expendía gasolina que habia entrado a tomarse un refresco y yo....yo estaba distraida mirando el mostrador de los dulces, cuando de pronto sentí que me tomaban con fuerza por el cabello y me halaban hacia el otro lado del mostrador, no pude verle la cara al sujeto, sólo escuché su voz que decía que era un asalto y que nos quedaramos quietos, con una mano sujetaba la pistola que apuntaba al chico y con la otra me sujetaba por el cabello con fuerza, a la vez que pedía a la chica cajera que le diera el dinero de la caja y al chico bombero que le diera el dinero que tenía en su braga de trabajo,  entonces movía la pistola de un lado a otro, a veces me la ponía de un lado sobre mi cuello, apoyándola con fuerza, y me decía que buscara en mi bolso el dinero que llevaba, yo sentí en esos momentos que no era a mí que me estaba pasando eso, me parecía estar en una película en cámara lenta, pero mis nervios no me traicionaron, tomé mi bolsa la abrí sobre el mostrador y vacié el contenido allí, abrí el portamonedas y saqué todo el dinero que llevaba, el sujeto me decía: " Saca más, anda, saca más" mientras seguía con el cañón del arma sobre mi cuello, le dije: "Es todo no tengo más, mira, y volteé el portamonedas abriendolo ", entonces el sujeto me soltó el cabello ( por fin!!) y apuntando al chico bombero, tomó el dinero de la caja, el del chico, y luego le dijo al chico que se arrodillara, yo no miraba, sólo por el rabillo del ojo, pensé que le iba a matar asi de rodillas, y me mantuve con los ojos cerrados y mis manos apoyadas sobre el mostrador dandole la espalda al sujeto, nunca le ví el rostro, entonces el pobre chico se arrodilló llorando, pedía que no le matara, no sé si ustedes han vivido algo parecido alguna vez, pero la mente se queda como suspendida en un vacio, y uno empieza a flotar en un escapismo por no aceptar esa realidad, luego el sujeto dijo: "No llores, que no te voy a matar, pero no te muevas, no se mueva nadie, hasta que me vaya" y fue caminando de espaldas hacia la puerta mientras nos apuntaba, asi abrió la puerta y otro tipo en una moto le esperaba, el sujeto subió a la moto y se escaparon, nadie de los que estaban en los autos afuera se dió cuenta de lo sucedido.

Lo que sé es que me costó moverme, recoger mis cosas, y meterlas en la cartera y cuando salí las rodillas me temblaban casi no podía caminar, todo sucedió como en unos 5 minutos, no fue más, pero me pareció una eternidad, siempre me digo, menos mal que no baje a los niños conmigo, no me quiero imaginar qué hubiese pasado si están allí, hubiesen podido llorar o gritar y el tipo les hubiese matado.

Pero hechos asi y peores son el pan de cada día en Venezuela, es lamentable, pero es la realidad, si tienes suerte salvas la vida, y sino no lo cuentas, como mi primo asesinado hace dos semanas, si no se hubiese resistido al atraco, él era militar, pero iba desarmado y de civil, quizá pensó que como eran dos chicos los asaltantes, los hubiera podido someter, pero no fue asi, uno de ellos le disparó al pecho varias veces y luego huyeron sin llevarse el auto.

Pienso en la inseguridad, pienso en el valor de la vida, pienso en lo que viven muchos seres humanos en países como Venezuela y otros muchos en el mundo, donde la vida no vale nada y el matar  es el pan de cada día.

Dice una amiga, "pero es que eso pasa en todas partes", sí es cierto, pero depende de la frecuencia conque pase, quizá mientras en Bélgica por poner un ejemplo pasa en un 5% en Venezuela pasa en un 95% de las veces, esa es la diferencia, otros dicen, "pero si uno se va a morir se muere en cualquier lado", eso puede ser cierto también, pero no está de más prevenir, estar atentos, cuidarnos, poner un poco de atención por donde vamos, a qué horas, etc....

La vida cuando no vale nada para otros, entonces comenzamos a vivir un desgaste social terrible, entramos en un proceso de involución que como una espiral comienza a arrastrarnos sin querer,  vivir presos del estrés, de la ansiedad, el miedo  y la angustia, es un " sin-vivir" , encerrarnos en casa, hacer grandes jaulas protectoras, poner rejas hasta el techo de las casas, usar cerraduras especiales, candados, alarmas, etc....saber que cada vez que sales a la calle vas vivo, pero no sabes si regresas muerto, eso, es algo que no se lo deseo a nadie.

Irse todos de un paìs inseguro tampoco es una solución, no pueden los ciudadanos abandonar sus países por la delicuencia y la inseguridad, pero entiendo a quien teniendo los medios para hacerlo lo hagan en aras de salvar su familia y vivir en paz.

No es tener miedo a morir en sí, es tener miedo a vivir sin poder tener paz y serenidad, es no poder sentirte segura de que tus hijos o nietos no tengan ni siquiera derecho a la vida, a una vida que les permita realizarse y ver sus sueños cumplidos.

Qué hace que las personas que matan para robar, no se conformen con robar nada más y dejar con vida a sus víctimas? , incluso las que no se oponen son asesinadas muchas veces, el desvalorizar la vida, el no saber que una vida es sagrada, que nadie tiene derecho a quitarle la vida a nadie y menos por una razón material ni por ninguna otra, la vida es un derecho inalienable, nadie puede quitartelo ni violarte ese derecho.

Y lo peor es que las personas que viven en medio de ese estado de inseguridad, aunque viven estresadas y atentas, muchas ya lo han aceptado como parte del cotidiano vivir, como parte del día a día, que seas atracado de vez en cuando, cada mes, semana o cada día, ya es algo que forma parte del vivir "normal", en sociología decimos, " Todo lo que se generaliza se convierte en normal"  y puede ser ese el caso, que un hecho generalizado, ya la gente lo comienza a ver como parte del diario vivir, además qué pueden hacer? si tienen que salir a trabajar cada día para comer y pagar sus cuentas? qué pueden hacer si no hay un Estado que les proteja?, me dijo una amiga que vive en Venezuela: "La vida sigue, debemos seguir viviendo, si nos toca, nos toca"....y qué ciertas son sus palabras, no pueden todos salir corriendo del país; decía mi hermana cuando le preguntaba, " Pero tú no vives asustada? no te angustia sentir esa inseguridad?  y ella me decía, " Claro, pero no puedo hacer nada debo trabajar, debo salir y hacer mi vida, además en una ciudad donde vive más de un millón de habitantes, no es seguro que te toque a tí, puede ser que sí, o quizá nunca te toque, no es a todo el mundo que atracan y matan", es que no puedo imaginarme que fuera a "todo el mundo", entonces viviríamos en un estado de muerte permanente.

La vida es un valor que no tiene precio, es un don divino, es un valor supremo, y qué frágil se nos vuelve en un segundo, ahora estamos y en un minuto más hemos dejado de estar, morir en manos de otro que decide acabar con nuestra vida, es algo que no puedo comprender, ya decía Hobbes, 
" El hombre es un lobo para el hombre"....y que cierto es!!

Confiemos en que como estamos en tiempos de Ascensión todos estos males puedan transmutarse con el AMOR, y que el mundo pueda ser un lugar seguro para desarrollarnos y vivir, pero mientras eso ocurre sólo me queda pensar en usar nuestra fuerza mental, usar nuestra positividad, nuestro poder natural, atraer con la mente un halo de protección, invocar a nuestro Arcángel Miguel que nos cubra con sus alas ante todo peligro, encomendarnos a nuestro Angel de la Guarda, y si hemos de morir en manos del hampa, pensar que la vida de éste mundo se acaba pero no la vida espiritual, es ese nuestro único consuelo.

Les dejo con un fuerte abrazo en la luz,


Dina

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