Hoy me he sentido inclinada a hablarles de la soledad.
Qué es la soledad?
Es un sentimiento bastante complicado de definir, porque va a depender de las situaciones y circunstancias de vida de cada persona y de cómo lo enfoque y sienta cada quien.
Podemos decir en rasgos generales que la soledad puede ser soledad de estar solo, es decir sin compañia, y soledad de sentirse solo, asi estemos acompañados. Dicen algunos que no hay peor soledad que la soledad en compañia.
La soledad de estar solos y sentirnos solos estemos o no acompañados, es un sentimiento que trae aparejado una sensación de abandono, de no pertenencia, de no formar parte de algo que deseamos, en el caso ciertamente de que esa soledad sea enfocada como algo negativo.
Hay una soledad por elección que es aquella que la persona escoge por voluntad propia y que se relaciona a esa soledad de no desear compañia, porque estando solo siente que es feliz, muchos podrán decir: Pero, quién es feliz solo? pues muchas personas lo son. Más de las que suponemos.
Conozco personas que me dicen que jamás se casarìan ni vivirían con otras personas, que su "soledad" es su derecho a ser libre, a vivir como desea, con sus reglas y patrones de vida, sin interferencias de segundos ni terceros, y que eso es lo que le hace feliz. Y por qué no pensar que es una opción de vida? es una opción de vida tan válida como la de casarse y hacer pareja y familia.
Estar solos sin desearlo, es como el caso de esas personas que no tienen familia ni amigos, que pasan las Navidades solos, que se sienten abandonados del mundo y de la vida.....personas que no han escogido ese destino pero que lo viven, esos ancianos por ejemplo que son considerados un estorbo por sus hijos y familiares y les ingresan en una casa de ancianos, y ya luego no les van a ver más nunca. Yo he visto ese tipo de soledad, en algunos de mis variados trabajos de voluntaria, estuve ayudando en casas de ancianos, y allí pude observar y vivir de cerca esa sensación de soledad-abandono, que sufren esas personas mayores.
Recuerdo que cada vez que llegaba a la Institución algunas de las ancianas corrían a saludarme y a abrazarme, una de ellas decía que yo era su sobrina que venía a visitarla, y otra decía que yo era su nieta......la verdad es que no tenían a nadie que las visitara, asi que les decía que yo era la nieta o sobrina de todas, que estaría con todas y que mi visita era para ser compartida, asi que conversaba con ellas, les leía textos y las escuchaba, sobre todo eso, escuchaba sus historias y todas versaban sobre la familia que ya no tenían o les había abandonado. Los ancianos en esos lugares necesitan ser escuchados y queridos. Un simple gesto basta para cambiarles el día y dibujarles una sonrisa en el rostro.
Pero....hay la soledad del que se siente solo a pesar de tener familia y vivir acompañado, no puedo decir que sea la peor soledad como dicen algunos, pero sí es un tipo de soledad díficil, tienes pareja pero te sientes solo, no eres amado por ella o no la amas, aunque le tengas afecto, a veces esas relaciones de esfuerzo no pueden romperse, por múltiples factores, a veces se sostiene por los hijos, otras veces por los convencionalismos sociales, otras por interés económico, otras por miedo a quedarse totalmente solo y aquí vale el dicho (al revés) "más vale mal acompañado que solo".....y otras veces, se mantiene esa soledad en compañia porque hay un aprendizaje que hacer en esa relación y también lecciones que enseñar, en el sentido espiritual del término y comprensible para personas que han escalado cierto nivel de evolución como almas y saben que parte de su misión es permanecer en esa relación forzada, que no daña, pero que enseña una lección de sabiduria y de avance en la vida del espiritu.
Con ésto no quiero decir que se deba permanecer en una relación que te daña o maltrata, ya eso atentaría en contra de la dignidad personal, sino que hay relaciones establecidas bajo el afecto-respeto y que son relaciones que deben vivirse para avanzar espiritualmente, más no son esas relaciones de amor maravilloso casi perfecto que pueden vivir otras personas y que seguramente es la que soñamos todos tener algún día.
Pero qué relación es perfecta? Ninguna.
La perfección es solo una cualidad podríamos decir de Dios, para los que creemos en El, o del Creador, o del Hacedor, como ustedes deseen llamarle, los seres humanos somos imperfectos con el propósito de poder aprender y evolucionar en nuestro camino de vida.
Entonces la soledad es un aprendizaje, siempre aprendemos de las situaciones que nos afectan, podemos hacer de la soledad una tragedia, o podemos hacer de ella un aprendizaje, está en nosotros cambiar el modo de verla, claro para que ésto suceda, debemos de tener la conciencia un poco abierta, despierta, para poder entender el significado de reversión de éste sentimiento, hacer que la soledad conspire en mi favor, es entender que de todo sufrimiento, abandono, se aprende y se convierte uno en una persona más fuerte y segura, por aquello de que "lo que no te mata, te fortalece".
Resurgir de la soledad y el abandono es posible, además no debemos olvidar que la mejor compañia somos nosotros mismos, no puedo estar solo cuando me tengo a mi mismo, a esa capacidad de maravillarme de la vida, con la naturaleza, con las cosas hermosas que puedo apreciar, y ésto no tiene que ver con la riqueza o pobreza material, la soledad la sufren todos, pobre y ricos, y todos pueden de ella aprender o transformarla en beneficio propio.
No hay soledad en el alma que sabe que se tiene a sí misma, aprender a estar con uno mismo es algo digno de respeto, aprender a escuchar a mi corazón en la soledad, entender lo que me susurra, apreciar la soledad para leer, escuchar una melodia, aprender un arte, escribir un poema, nutrirse del mundo y la vida, a veces el silencio y la ausencia de presencia son indispensables para poder renovarnos como seres de luz, para poder meditar, contactar a nuestros guias, recibir mensajes y pautas de evolución. El "ruido" de los otros puede ser un factor muy pertubardor a veces.
La soledad es también aprender a guardar espacios propios, espacios de ausencia, donde a pesar de tener pareja o estar en compañia se hacen necesarios esos espacios en soledad, espacios de privacidad, íntimos, que nos hacen ser únicos y diferentes, porque amar a otro no es ser Uno, sino seguir siendo dos, pero compartiendo el corazón.
Sobre la soledad hay mucho que decir y que expresar, pero hemos nacido solos, uno a la vez, incluso en el caso de hermanos múltiples, se nace solo y nos iremos de éste mundo solos, sin más compañia que la de nuestra alma.
Como dijera Ralph Waldo Emerson : "El hombre grande es aquél que en medio de las muchedumbres mantiene con perfecta dulzura, la independencia de la soledad".
Les dejo un abrazo en la luz,
Dina
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