"He aquí que un día la oscuridad se percató de que la luz cada vez le estaba robando mayor espacio y decidió entonces ponerle un pleito. Tiempo después, llegó el día marcado para el juicio. La luz se personó en la sala antes de que lo hiciera la oscuridad.
Llegaron los respectivos abogados y el Juez. Transcurrió el tiempo, pero la oscuridad no se presentaba. Todos esperaron pacientemente, pero la oscuridad no aparecía. Finalmente, harto el Juez y constatando que la parte demandante no acudía, falló a favor de la luz. ¿Qué había sucedido? ¿Cómo era posible que la oscuridad hubiera puesto un pleito y no se hubiera presentado? Nadie salía de su asombro, aunque la explicación era sencilla: la oscuridad estaba fuera de la sala, pero no se atrevió a entrar porque sabía que sería en el acto disipada por la luz.
*El Maestro dice: La luz es consciencia y sabiduría, en tanto que la oscuridad es ofuscación y estrechez de miras. Si te estableces en la sabiduría, ¿hay lugar para la ofuscación?"
(Cuento clásico de la India)
Hoy 25 de diciembre estamos entrando en otro nuevo año de luz, marcado por el Nacimiento del Niño Dios, abramos nuestros corazones y déjemos que la maravillosa energía del Creador los innunde de Paz y Amor.
Déjemos afuera a la oscuridad, mantengámonos en la luz, para que asi la sabiduría nos alumbre siempre en cada uno de los pasos a dar, en cada una de las decisiones a tomar en éste nuevo período de luz que ahora comenzamos a transitar.
Que la luz nos ilumine siempre,
Dina
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