Porque es desde dentro, desde el silencio y el corazón donde la belleza toma forma.
Un genio tiene en su interior todo lo que tenía que darnos para la posteridad, por tanto a la hora de componer, esa genialidad citada y a nivel musical el conocimiento de los tonos y el eco de las vibraciones de su piano ayudado por instrumentos para sordos, le hacían plasmar todo su arte en papel pautado.
Lo único triste de ésta sordera fue que tuvo que rehuir de la compañía de los hombres para esconder el mayor mal que puede sucederle a un músico, es obvio. Con lo que se ganó el apelativo de “ oso salvaje” y una personalidad difícil, pero justificada. Y lo segundo la penuria económica a la que le llevó, puesto que una de las mayores fuentes de ingreso de los músicos era dar conciertos de sus propias composiciones y demostrar el virtuosismo pianístico que había en ellos. Ludwig también se vió obligado a cesar en estas actividades. Al tiempo se dijo sobre la casa de Bethoven que era “ la casa de la pobreza”.
Esto es lo único triste y negativo de su enfermedad, lo demás es obvio, la genialidad habitaba en su interior.
Florestán
Esta es una colaboración de nuestro amigo Florestán, poeta y guerrero de luz. Gracias amigo por tus maravillosas palabras sobre el Maestro Beethoven.
Dina
Dina
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