Reflexionando sobre el Egoísmo

Esta mañana me desperté pensando en el Egoísmo, será porque estamos entrando en un mes en que se supone que debemos erradicar todos los sentimientos que nos hacen daño y dañan a los demás en el amplio sentido de la palabra. Aunque soy de la creencia que debemos erradicarlos siempre de nuestras vidas, no sólo en tiempo de Navidad, sino siempre, en cada mes o minuto de nuestras vidas.

Lo que sucede es que en  ésta época en que estamos se magnifica el Amor, la Paz, la Cooperación, la Amistad entre los hombres, es un tiempo para reflexionar, perdonar y dar, sobre todo para dar.

La palabra egoísmo está compuesta por la palabra Ego, que todos sabemos que el Ego es ese que todos tenemos dentro, que nos controla, nos hace llenarnos de sentimientos negativos, y que son contrarios a lo que puede ser el Yo, el Yo es la parte verdadera de nuestro ser, somos nosotros en nuestro interior, ese Yo es lo que nos identifica a cada uno, y es el Yo que debemos cuidar, amar, y proteger. La otra palabra es Ismo, Ismo puede ser doctrina, pero también es una preferencia e inclinación, preferencia o inclinación por nuestro Ego.

Hay un tipo de egoísmo denominado moral o ético que es ese que nos hace pensar en nosotros, en nuestros intereses, con el objeto de ascender, de evolucionar, de ser mejores cada día, y un egoísmo negativo o perverso que es ese que nos hace amarnos por sobre todas las cosas sin dejar espacio para otro amor que no sea el amor a nosotros mismos, es donde predomina el Ego en su máxima expresión.

Sabemos que para amar a los otros, debemos aprender a amarnos a nosotros mismos, nadie puede amar a otro si no se ama a si mismo, porque si no se ama a si mismo está vacio de amor, y estando vacio no puede dar lo que no posee. Suena lògico, no?  

Aquí entonces podemos hablar de autoestima, de cuánto podemos amarnos, valorarnos y desearnos todo lo bueno antes que nada. Nuestra autoestima es como una coraza que nos protege del exterior, del daño que otros nos causan, si tenemos una autoestima fortalecida podremos siempre capear los temporales con la frente en alto, sabiendo que ninguna opinión o crítica podrá nunca afectarnos ni herirnos. Saber quienes somos, qué queremos y para dónde vamos con seguridad, siempre tendrá que ver con lo mucho que nos amemos a nosotros mismos.

Recuerdo que de niña siempre escuchaba a mi mamá decirnos: "Ustedes son hermanos, deben compartir todo, no es bueno ser egoístas" , crecí escuchando ésta frase, " Hay que compartir, no debemos ser egoístas", y entonces la procesé como "es bueno compartir lo que se tiene con otro, dar a los demas, prestar, colaborar, cooperar, etc....." , siempre era el típico caso que un hermano no deseaba prestarle algo al otro, decía: Es que eso es "mio", por  qué se lo debo prestar? 

A veces escuchaba a mi mamá decir también: " Bueno, bueno, cada uno tiene lo suyo, para eso se los compro todos iguales para que no peleen" , era un modo de que todos estuviesemos contentos, porque todos teníamos el mismo juguete, o la misma ropa, o el mismo libro, etc...a veces variaba el color, y eso era motivo de disconformidad y desaveniencias, a lo que mi madre decía: " La próxima vez todos tendrán las cosas idénticas" y asi asunto resuelto.

Pero ésto no es sólo un tema de la infancia, resulta que al ir creciendo, también podemos desarrollar conductas egoístas,  cuando pensamos más en nosotros mismos que en todos los demás que nos rodean, incluido muchas veces hasta los propios hijos, hay madres que en algunos casos han preferido a sus parejas que a sus hijos, a la pareja que no es el padre del niño-a, en éste caso siempre escuchamos que el amor por los hijos es superior a todo, pero no siempre es asi, hay un egoismo que entra en juego, y es cuando alguna madre prefiere el amor de su pareja al bienestar de un hijo, y es ahí cuando el amor que se tiene a sí misma y a lo que le causa placer, que no ve que el hijo es quien más le requiere y necesita y me refiero a esos casos donde las parejas o padrastros matan o violan a los niños de su mujer, muchas veces esas madres saben que hay algo que no está bien pero no hacen nada para evitar el daño a su hijo, no es el caso de criticar pero quizá debamos considerar que en muchos casos asi, hay un problema de autoestima involucrado, tener la aprobación y el amor de la pareja en prejuicio del propio hijo, es algo que es superior a el amor que puede sentir por sus hijos.

El tema del egoísmo no es tan sencillo, es mucho más complicado de lo que pensamos, recuerdo que cuando leía el libro de Jorge Bucay, " De la autoestima al egoísmo", el comentaba que en algunos casos es el sentimiento de culpa el que nos hace reaccionar y dar la mano a otro, porque pensamos que si no qyudamos a otro (y aquí entra la solidaridad en juego),  mañana puede ser que seamos nosotros quienes necesitemos de otros, es como ponerse en lugar del que sufre, entonces lo ayudamos pensando en esa posibilidad de que también nosotros podamos recibir ayuda si la necesitamos, por aquello de que todo lo que haces a los demás se te devuelve, sea en mal o en bien, pero.....eso también es una conducta egoista, ayudo pensando en mi culpa, en cómo me siento, pensando en ser retribuido del mismo modo, no es una ayuda desinteresada, de algún modo lo hago por mí mismo, por no sentirme culpable, malo, o que sé yo, pero también es cierto que por otro lado cuando hacemos algo por los demás sentimos un gran placer interior por haber ayudado, eso si lo consideramos como un egoismo sería en todo caso un egoìsmo noble, porque ayudamos y de paso nos ayudamos a nosotros mismos ayudando al otro, es un egoísmo de crecimiento, de evolución, que no puede ser considerado malo o dañino.

Dice Bucay en su libro lo siguiente que copio textualmente:

 
"Los hawaianos tienen un idioma con muchas menos palabras que las nuestras. Una de ellas, la que se usa para agradecerle a otro, es la palabra majal, que quiere decir te agradezco mucho. Y para responder a ese agradecimiento tiene una palabra —como nuestro “de nada”—, y esa palabra también es majal.
Cuento esto porque, en el contexto de ese lenguaje, está queriendo significar muy claramente que cuando uno hace algo por alguien, también es uno el que agradece al otro haberle permitido hacer algo por él. Es decir que también es uno el que disfruta el placer de haber podido ayudar a alguien. Majal/Majal significa te agradezco que me hayas ayudado/te agradezco que me hayas dejado ayudarte. —
Porque, en última instancia, en este proceso donde uno ayuda a otro, los dos ganan.
Pensar que si alguien ayuda a otra persona renuncia pierde algo, o pensar que para poder ayuda a otro hay que sacrificarse, son ideas siniestras, conducen, lo que es peor aún, a concebir el amor en términos de sacrificio.
El amor, justamente, es todo lo contrario, el amor consiste en no vivir sacrificadamente.
Hay que tener en cuenta aquellas cosas que uno hace con el amor. El amor consiste no vivir sacrificadamente. Hay que tener en cuenta aquellas cosas que hace con el amor. El amor consiste en que uno pueda disfrutar de aquellas cosas que hace por el otro egoístamente, porque se prefiere a a sí mismo antes que al otro. Y porque alguien se prefiere a sí mismo decide hacer determinadas cosas por el otro. Incluso es esto lo que al otro más le puede servir.

La única ayuda que no genera deuda es la ayuda dada por el placer de ayudar."

El hacer las cosas con amor, empezando por el amor a nosotros mismos, es lo que a los demás siempre puede servir y ayudar. Porque el amor no es sacrificio, sino placer de dar, de compartir, de ser, de disfrutar, en en sentido sano del término y desde un egoismo ético sano.

Algo que me ha llamado la atención en éste país donde vivo, no con todos, pero si con algunos, es que cuando uno le presta algo a alguien, esa persona enseguida te lo quiere pagar de algún modo, es como si no quisieran sentirse en deuda, aquí todo se paga, incluso los gestos de amistad y desprendimiento, algo que no puedo entender. Recuerdo una vez que le presté a una amiga un molde de tortas que ella necesitaba, luego ella al devolvermelo me lo devolvió con unos huevos adentro, le dije: Y esos huevos? ella dijo es por haberme prestado el molde, le dije: "Pero no debías haberlo hecho, no necesito esos huevos, agradezco el gesto, pero te presté el molde sin esperar a que me dieras nada, lo hice por amistad" y ella dijo, es mejor asi, asi no me siento en deuda si tú aceptas los huevos, por favor!, asi que acepté los huevos, para que mi amiga se sintiera bien con ella misma.

Como verán  cada quien entiende las cosas según su punto de vista, y les cuento ésto, porque me vino a la mente al leer la frase de Bucay: "La única ayuda que no genera deuda es la ayuda dada por el placer de ayudar.", pero no para todos es asi, ni todos lo asumen de ese modo.

Lo cierto es que el querernos demasiado a nosotros mismos que nos haga ser incluso egocéntricos, es algo insano, porque no nos permite pensar en los demás, el amor se basa en dar, ayudar, compartir, cooperar con desprendiento, sin esperar recompensa, sólo por el placer de ayudar, ayudando a los demás me ayudo a mi mismo, es el único egoísmo sano que me permite evolucionar y crecer ayudando a los demás a hacerlo también.

Les dejo un gran abrazo en la luz, 

Dina

 " Tu conciencia es la medida de la honradez de tu egoísmo. Escúchala atentamente."
Richard Bach